Las empresas de aceituna de mesa agrupadas en Asemesa han estado luchando prácticamente en solitario contra los aranceles a la aceituna negra desde el mes de julio de 2017. En una primera fase hubo que defenderse ante unas investigaciones arbitrarias y abusivas de EEUU que tenían la clara intención de obligarnos a bajar los brazos y tirar la toalla, pero eso no sucedió a pesar de la pasividad de la UE y del Gobierno de España. Decidieron que había que esperar a las resoluciones finales de las investigaciones, cuyo resultado fueron unos aranceles que sumaban el 35%. A pesar de todo, seguimos luchando contra este arancel por las tres vías posibles: la justicia ordinaria americana, la Organización Mundial del Comercio y las revisiones administrativas anuales.

Luego, al igual que sucedió con otros productos agroalimentarios españoles, nos vimos salpicados por el conflicto aeronáutico y nos impusieron, esta vez sobre la aceituna verde, un arancel del 25% en octubre del año pasado. En ambos casos la causa ha sido la misma: la puesta en duda por EEUU de la legalidad de las ayudas de la UE respecto a las normas de la OMC.

En el caso de las ayudas a Airbus, la OMC le dio la razón a EEUU y ahora estamos pendientes de lo que se decide sobre las ayudas de la UE a los agricultores de aceituna de mesa que es como cuestionar todo el sistema de ayudas de la PAC. No cabe duda por tanto de que nuestro sector es el más perjudicado por la política proteccionista de EEUU del presidente saliente Trump.

Ahora se abre una ventana de esperanza por las contramedidas arancelarias contra EEUU adoptadas por la UE y por la llegada del Gobierno demócrata de Biden, cuestiones ambas que teóricamente deben favorecer una solución negociada. Las noticias del inicio de una nueva fase de negociaciones entre EEUU y la UE son esperanzadoras pero deben serlo para todos los productos afectados incluida la aceituna negra. Nuestro sector no entendería que la aceituna negra quede excluida de estas negociaciones en las que todo puede y debe tener cabida para encontrar una solución definitiva. Esperemos que en esta ocasión no nos volvamos a encontrar solos sin apoyo ni de la administración ni de los demás sectores.